El cabello rizado requiere unos cuidados especiales ya que por sus características precisa atenciones distintas a las de un cabello corto o un cabello largo.
Vamos a darte una serie de consejos y pasos a seguir para conseguir una melena saludable que resalte tus rizos y no dañe tu cabello con productos agresivos.
¿Cómo debo peinar mi cabello para resaltar los rizos?
El primer paso en tu rutina de cuidado del cabello antes de lavarlo es desenredarlo, ya que si lo peinamos cuando esté mojado será más frágil y podrá quebrarse con mayor facilidad.
Para secar el cabello neceistas un secador con difusor para aplicar el calor en la raíz, lo que conseguimos es que los rizos se aplanen (sin hacer que desaparezcan) por lo que solo conseguiremos un aspecto descuidado de nuestro cabello, sin ser rizado ni liso del todo.
Por lo tanto, el uso del difusor es la mejor opción, o, en caso de no tenerlo, secar el cabello en dirección adversa: colocando la cabeza boca abajo y aplicando el calor desde las puntas hasta las raíces; esto le dará mayor volumen a nuestra melena. De todas formas, lo cierto es que la mejor solución es dejar el cabello secar al aire libre, ya que el secador reseca los pelos rizados. Por lo tanto, haz uso del mismo solo en ocasiones muy necesarias, y siempre a baja temperatura.
Como ya hemos dicho, el cabello rizado no requiere de los mismos cuidados que el liso. Por lo tanto, debemos elegir un cepillo específico para cada caso. En el caso del cabello rizado, lo más recomendable es cepillar nuestro pelo con nuestros dedos, para así mantener la forma natural de los rizos y que se vean marcados. De todas formas, también podremos hacer uso de un peine con dientes anchos.
El cabello rizado tiene una cutícula menos lisa que los demás tipos de cabello, por lo tanto, esto lo hace más sensible respecto a las agresiones externas. Al salir de la ducha, tendemos a buscar la solución más rápida para secar nuestro cabello, y esto suele suponer echar mano de la toalla.
Debes evitar a toda costa frotar tu pelo mojado o húmedo con una toalla, esto lo dañará y hará que se rompa con mayor facilidad. En este caso, enrolla la toalla en tu melena y aprieta con tus manos para eliminar la humedad, pero evita frotarlo. Además de ello, en lugar de una toalla, puedes hacer uso de una camiseta de algodón para secar tu cabello, lo cual es mucho más delicado.
Por último, es necesario que marques una rutina de lavado. Cuando lo laves, trata de aplicar el champú en las raíces, evitando que éste tenga demasiado contacto con el resto del cabello y haz uso de mascarillas hidratantes.
Soluciones a los problemas más comunes del pelo rizado
Uno de los problemas de los cabellos rizados suele ser el llamado frizz o encrespado. Ante esto, un gran error suele ser hacer uso de serum para eliminarlo.
Esto solo logrará quitarle volumen a nuestra melena y apelmazarlo en caso de un uso excesivo, por lo tanto, lo más recomendable es utilizar el serum en pequeñas cantidades, en caso de ser necesario, o directamente prescindir del mismo.
En caso de melenas muy rizadas con rizos muy pequeños y encrespados, los rulos serán tu mejor aliado. Olvídate de esos pequeños rizos y haz uso de unos grandes rulos que darán un aspecto de peinado profesional a tu melena, sin dedicarle demasiado tiempo. Cuanto más grande sea el rulo, más generoso será el rizo; y al revés.
¿Cabello demasiado seco? Lo más importante a la hora de mantener sana una melena rizada es la hidratación. Es recomendablque utilices un champú sin sulfatos, en su lugar, aplica mascarilla de medios a puntas y déjala actuar de 5 a 10 minutos en cada lavado. Una de las mascarillas más potentes para hidratar el cabello es la mascarilla LUMINOIL de Elgon.
Si tu problema es que los rizos de tu cabello no están definidos y más bien sientes que tienes una melena de león, puedes hacer uso de un gel fijador especial para cabellos rizados, consiguiendo así que tu onda logre mayor definición.
¿Sufres de puntas abiertas? Además de hacer generoso uso de una mascarilla cada vez que laves tu cabello, puedes utilizar un reparador de puntas específico que no requieren aclarado, esto mantendrá tus puntas más hidratadas.
Relacionado con el problema anterior, otra cosa que atormenta a las mujeres de pelo ondulado son los rizos quebradizos. Una solución para ello puede ser el aceite. Una vez utilizado tu gel o crema para darle forma a tus rizos, puedes sellar tu peinado aplicando un par de gotas de aceite en las puntas para mantenerlas hidratadas y fijas.
¿Pelo lacio y sin volumen? Cuando tenemos este problema solemos enfocarnos en rizar nuestro cabello desde las puntas, lo que hace que éste adquiera más peso y de un aspecto apelmazado. Para poder darle volumen al cabello debemos empezar desde las puntas; para ello, puedes hacer uso de pinzas de plástico. Separa tu cabello en secciones, y, en caso de querer crear unas ondas naturales, enróllalo y amárralo con las pinzas antes de ir a dormir.
¿Cómo cuidar el cabello rizado de una niña?
La principal manera de saber cómo cuidar el cabello rizado de una niña y mantenerlo brillante, suave y lleno de vitalidad es utilizando los productos adecuados. Es indispensable aplicar champús para cabellos rizados de niños, que contienen ingredientes más suaves para evitar irritaciones y daños en el cuero cabelludo.
Además, es muy recomendable evitar en lo posible los productos que contengan sulfatos.
Por supuesto, el cuidado del pelo ondulado en niños también depende mucho del cepillado, que debe hacerse con mucho cuidado y sin tirar del cabello para forzarlo. La mejor alternativa para el cepillado son los peines de dientes gruesos, que respetan la forma natural de los rizos y ayudan a mantenerlos en perfecto estado.
Cada cierto tiempo, es recomendable aplicarse un tratamiento de acondicionamiento profundo para mantener los rizos en forma saludable. En la casa de la peluquería Alpel tienes disponibles te ofrecemos los champús para cabellos rizados con los que conseguirás lucir una melena suave, nutrida, brillante y con rizos de revista.
Cómo hacer una mascarilla casera para el pelo rizado
Los que tenemos cabello rizado, sabemos que aunque el pelo rizado es un cabello con mucha personalidad y que luce súper bonito, a veces es una guerra y todo un reto mantenerlo.
Por eso tendemos a recurrir a buscar las mejores mascarillas para mantener el pelo lo mejor posible, sin que lo rizos se chafen y sigan definidos. Y aunque toda las revistas y anuncios nos prometen que su producto hará un milagro y que conseguiremos los resultados con los que tanto tiempo llevamos deseando, después de probarlos y dejarnos una fortuna nos damos cuenta de que no hacen ni la mitad de lo prometido o que no conseguimos al cien por cien el resultado deseado.
Así que, si ya has llegado al punto de la desesperación y no sabes que más a hacer para mantener tu cabello rizado de la mejor manera posible, sano y brillante, sin que meter un peine sea todo un reto, sigue atento a esa receta para hacerte una mascarilla casera, sin gastarte una fortuna ni volverte loco.
Normalmente el pelo rizado tiende a quebrarse y mantener la vitalidad, brillo y suavidad es difícil. Este cabello tiende a secarse y por ello necesita cuidados. El cabello rizado, al no estar en contacto directo con el cuero cabelludo, tiene escaso contacto con las glándulas sebáceas, que son las encargadas de lubricar y de no dejar la entrada de agentes patógenos y las propiedades suavizantes que estas generan.
Además la cutícula tiende a ser menos lisa, por lo tanto es más propenso a agresiones externas. Por ello el cabello rizado hay que cuidarlo con la mayor suavidad posible, además de proporcionarle mucha nutrición. Por lo tanto, todas las mascarillas que contengan lípidos naturales, protegerán el cabello con una fina película y así conservarán su forma, proporcionando resistencia y elasticidad, sin resecarse demasiado o dando la sensación de un aspecto pegajoso.
Para conseguir todos los resultados mencionados, realizaremos una mascarilla casera que contenga aceites vegetales. Los aceites vegetales, son idóneos para cabellos rizados que estén resecos y que busquen estar definidos y con brillo. Estos aportan vitaminas, ácidos grasos insaturados, entre otros más.
En concreto, el aceite de aguacate contiene muchas características esenciales nutritivas que necesita el cabello rizado. De esta manera le aportamos hidratación y suavidad. En definitiva un aspecto totalmente distinto que sin la aplicación de este elemento no tendrías.
Como hemos dicho anteriormente hacer una mascarilla es muy sencillo y no cuesta casi ni tiempo, ni esfuerzo, ni dinero. Así que estate atento a los siguientes pasos y conseguirás los tan esperados resultados que ningún producto de alta gama te ha proporcionado hasta ahora.
Para elaborar esta mascarilla necesitaremos: una cucharada de mayonesa, media taza de agua tibia, dos cucharaditas de aceite de coco o rosa mosqueta, un aguacate, una toalla, papel film y un bol.
Cogeremos el bol y mezclaremos todos los productos menos el agua tibia, machacándolos hasta crear una masa homogénea y sin grumos. Debemos asegurarnos de batirlo bien, ya que es importante que no queden grumos algunos. A continuación, añadiremos el agua tibia despacio. Es aconsejable que se introduzca el agua a medida que batimos con suavidad.
Cuando todo esté listo, aplicaremos nuestra mascarilla casera sobre el cabello, comenzando por el cuero cabelludo hasta las puntas. Una vez aplicado, envolveremos el cabello con la toalla para mantener el calor. Dejaremos actuar una media hora. Cuando haya pasado la media hora retiraremos la toalla y aclararemos con agua y a continuación enjabonaremos con el champú habitual de siempre. Una vez el cabello se haya secado, notarás un cabello mucho más brillante, hidratado, suave, definido y con mucha más vida que antes. ¡Todo un milagro!
Para que este resultado sea duradero, es recomendable que apliques esta mascarilla una vez cada semana o dos veces al mes. Si te sobra de la aplicación anterior, no hará falta tirarla. Solo tendrás que meterlo en el frigorífico hasta su próximo uso. Además de aplicarte esta gran mascarilla con soluciones eficaces, es recomendable que sigas los siguientes consejos para mantener un cuidado de diez.
Será importante evitar lo máximo posible aparatos como el secador, ya que este reseca el pelo. Por lo tanto es mucho mejor secarlo al aire libre, sobre todo en verano o cuando no haga excesivo frío. Pero en el caso de ser invierno, o de tener prisa, es más recomendable utilizar el secador a baja temperatura o utilizar un difusor.
También hay que tener en cuenta que la famosa plancha de pelo es muy agresiva. Por eso es mejor utilizarla para momentos especiales y siempre después de haberte aplicado productos especiales para el daño que pueda producir el calor.
Y para que no quede enredado después del lavado, es aconsejable peinarlo con un peine desde raíces hasta puntas, debajo de la ducha nada más aclararlo.
Además de que si te gusta actualizar tu look de vez en cuando, un corte escalonado es ideal para cabellos rizados. Y si algún día prefieres definirte más el cabello y no quieres recurrir al calor, entonces lo mejor es aplicar cremas definidoras de rizos. Si tienes el cabello con rizos muy pequeños y a la vez encrespados y enredados, entonces mediante la ayuda de unos rulos conseguirás tenerlos suaves y ligeros sin tener que utilizar el calor. Utiliza más grandes o pequeños según como los quieras. Un truco para que queden perfectos es utilizar la técnica del papillote, que consiste en enrollar cada mechón con presión.
Por ultimo pero no menos importante, si mantenemos una buena alimentación aparte de poner en práctica todos los consejos anteriores y del uso de mascarillas caseras, obtendremos un pelo sano del todo. Por ello es importante saber que el cabello está compuesto por agua, lípidos y proteínas y estas determinan cuanta fuerza y elasticidad tiene el cabello. Por lo tanto no mantener una buena alimentación puede modificar y alterar la salud de tu cabello. Así que para que nuestro cabello este sano debemos ingerir alimentos que contengan azufre, hierro, ácidos grasos omega 3, potasio y ácido fólico.
Sin duda mantener nuestro cabello rizado totalmente sano, no es tan difícil y está al alcance de todos.